10 AM | 09 Feb

EL JOVEN MARX- PELI-FELIX

Si las cosas no se hubieran torcido por el famoso virus, habríamos realizado alguna conferencia sobre el pensamiento de Engels, ya que el mes de noviembre pasado se cumplía el segundo centenario de su nacimiento, y ya sabéis lo que nos gustan las celebraciones. Chazarra, al que seguro invitaríamos, nos diría con toda seguridad que Friedrich Engels es contundente, vivaz y zigzagueante, cuando esgrime sus argumentos dialecticos. Maneja la batuta con habilidad y sabe elegir los momentos adecuados para atacar y poner de manifiesto las debilidades del adversario. (Lo tiene escrito).

Haríamos, sin duda, un análisis crítico del “Anti-Dühring”  y rendiríamos, a nuestra manera, un tributo a la memoria de uno de los principales clásicos del pensamiento socialista. Eugen Dühring pretendió construir una versión descafeinada del socialismo con la indisimulada intención de sustituir el pensamiento transformador de Marx y Engels.

No estaría de más que tuviéramos los ojos bien abiertos para identificar a los ‘dühring’ de hoy, que deslegitimando el pensamiento de la izquierda, no hacen otra cosa que un panegírico del statu quo de las políticas conservadoras y de un cada vez más peligroso populismo reaccionario con indisimuladas resonancias ‘trumpistas’.  Vivimos tiempos que podríamos denominar propios de un cinismo superlativo. No es momento de rasgarse las vestiduras, sino de argumentar con propiedad y debatir con rigor, mostrando los puntos fuertes del pensamiento dialéctico aquí y ahora. Quienes pretenden pisotear impunemente la memoria… (Hoy he tenido un caso particular en las redes)  ignoran que los rescoldos del pensamiento dialéctico, todavía pueden producir argumentos que generen una práctica transformadora. Estoy seguro que la visión de la película “El Jóven Marx”  es una invitación expresa a que recuperemos el gusto y la necesidad por polemizar, empleando argumentos sólidos y dialecticos frente a tantas ‘fake news’, tergiversaciones y falsificaciones emitidas desde diversos centros de poder.

Ya ves Eugenio como se le puede sacar punta a todo. Estas pelis, y en general todas, si no las dejas te siguen. A mí me obligan a desempolvar viejos libros que nos cuesta encontrar. Historias del socialismo (el famoso Cole) el libro de Thompson prologado por Josep Quintana (lástima de su participación en el simposio España contra Catalunya) “La formación de la clase obrera en Inglaterra”, y en fin, hacer una descarga sobre la polémica “Marx-Proudhon” (la encontraréis pinchando en filosofía) que sugirió Alfonso, así como subir la secuencia de la película. Es muy interesante sacar libros de las estanterías y ver lo que tenemos subrayado.

La película recrea muy bien la época quizás porque los guionistas leyeron el libro de Engels sobre las condiciones de los obreros.Así hacía la descripción de la “pequeña Irlanda” la zona de Manchester situada al suroeste de Oxford Road:

“Por todas partes montones de desperdicios, inmundicias y fango, entre charcas; la atmósfera está apostada por las emanaciones y se hace oscura y pesada con el humo de una docena de chimeneas…Pero, ¿Qué decir si nos entramos en esas casuchas que contienen como mucho dos piezas y un desván, un sótano, y habitan por término medio veinte individuos”

En el libro de Roger Mateos: “Caso Cipriano Martos, vida y muerte de un militante antifranquista” (al que, al contrario que Puig Antich, no se le ha dado ninguna relevancia, quizás por ser un obrero) se cita el barrio donde vivía en Sabadell: ca n’oriac, can oriach, o conocido como Kansas City.No fue asfaltado hasta 1976. La historia de Cipriano es muy interesante. Resaltemos que murió en el año 1973 en el hospital San Joan de Reus después de haber pasado por el cuartel de la Guardia Civil. El Libro es del 2018.

Joan y Mercedes nos contaron que conocían las fábricas textiles de los años 50 del pasado siglo.Seguramente los obreros no tenían las mismas caras  en aquella época, pero lo que sí es seguro es que se parecerían mucho  a los que sacaban en la “Ciutat Cremada”

Dejo para otros las figuras de Jenny y Mary Burns, la de Proudhon, o las de la Sagrada Familia. Destaco la nota musical del final acompañando los créditos finales Me refiero al “Like a Rolling Stone” de Bob Dylan. Algunos versículos de esta balada de Dylan dicen: “Hubo una época en la cual te vestías muy bien / arrojabas una moneda a los vagos, en tu plenitud. / ¿No es verdad? / La gente te advertía: ‘Ten cuidado, muñeca, puedes caer’ / pero tu pensabas que todos ellos estaban bromeando. […] Ahora ya no hablas tan alto / ahora no pareces tan orgullosa / de tener que mendigar tu siguiente comida. / ¿Cómo se siente? / Estar sin hogar como una completa desconocida / como una piedra que rueda”.

Que cada uno la tararé como pueda, aunque yo hubiese preferido la vieja canción de los trabajadores.

(Usar sin descanso la nueva sección ENVÍANOS TU ARTÍCULO)

 

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